¿Dónde está el límite? Ajram se la juega cada día, con ambiciones y
objetivos, agotando todos los recursos necesarios para hacer realidad
los retos que se propone ya que, nos recuerda, el conformismo es una
trampa en la que no hay que caer. Su filosofía no es ganar, sino
sentirse bien con su rendimiento, luchando contra sí mismo y ver hasta
dónde se puede llegar.
El límite es, en definitiva, siempre el próximo reto. Tener una meta es
lo que te hace disfrutar. Si como dicen la vida son dos días, en lugar
de quejarse más vale levantarse y volver a intentarlo con más fuerza.
Cuando se ve la conferencia de Josef Ajram da muchos sentimientos ya que
podemos ver como si uno se pone objetivos podemos realizar muchas cosas
pero primero que todo cuando se cumple un objetivo tenemos que darle un
premio al cuerpo ya que cada vez que cumplimos algo antes de dar el
premio primero no dejamos que pase el objetivo cumplido
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